Mi cumpleaños fue, gracias a Dios, mucho mejor de lo que esperaba.
Una que no esperaba recibir nada terminó con:
.el collar que alguna vez le comentó a sus amigos que le había gustado
.un corazón de ferreros rocher
.una nueva maceta (ahora con flores!) para sustituir los chiles muertos que tenía enseguida de su cama
.un CD de música árabe para que nunca se le olvide aquella noche
.una bolsita que, igual que ella, se vino de mojada de Paraguay para acá
.una o dos llantitas más por el riquísimo pastel que le hizo una amiga hermosa
.una cruda terrible (absinto y narguillet no se combinan, mucho menos cuando eres novata!)
.tarjetas, postales, mails, llamadas telefónicas, dedicatorias en el messenger, tele-serenatas que terminaron arrancándole más de dos lagrimotas de cocodrilo.
.y sobre todo, muchos abrazos, besos y cariño que se hicieron llegar puntualitos y a lo largo de todo el día desde todo el continente (incluso uno del otro lado del atlántico!)
A todos, Alemania, Francia, Paraguay, Colombia, Brasil, México, muchísimas gracias por un día inolvidable!
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Ahora, ¿quién me hace el favor de traerme de regreso al mundo real?
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